Una carta de denegación de USCIS no tiene por qué ser la última palabra en su proceso migratorio. Con plazos de apelación estrictos—frecuentemente solo 30 días—actuar rápidamente es esencial para proteger sus derechos.
No deje que una denegación descarrile su futuro en América—obtenga ayuda legal para luchar antes de que expiren los plazos críticos.
Las cartas de denegación de inmigración no son solo decepcionantes—son devastadoras. Representan sueños destrozados, familias separadas y futuros repentinamente puestos en duda. Pero esto es lo que USCIS no le dice: una denegación no es el final. Es simplemente el comienzo de su lucha.
En Holden Law Firm, le ayudamos a convertir las denegaciones de inmigración en aprobaciones. Hemos ayudado a innumerables clientes en Gainesville y en todo Georgia a apelar con éxito rechazos de visas, denegaciones de tarjetas de residencia y decisiones desfavorables de los tribunales. Cuando el sistema dice “no”, nosotros encontramos un camino hacia el “sí”.
Cuando un juez de inmigración ordena la deportación o niega un alivio como el asilo o la cancelación de la deportación, usted tiene derecho a apelar ante la BIA. Estas apelaciones implican escritos legales complejos y plazos estrictos—típicamente solo 30 días desde la decisión.
Nuestro enfoque incluye:
Si USCIS deniega ciertas solicitudes—como visas de empleo, peticiones basadas en inversiones o clasificaciones de inmigrantes especiales—la AAO suele ser su siguiente paso. Hemos apelado con éxito denegaciones relacionadas con:
A veces, el camino más rápido hacia adelante no es una apelación formal, sino pedir al responsable de la decisión original que vuelva a examinar el caso. Presentamos mociones estratégicas para reabrir o reconsiderar cuando:
Cuando las apelaciones administrativas fallan, los tribunales federales proporcionan otra vía de revisión. Llevamos casos de inmigración a los Tribunales de Distrito de EE.UU. y a los Tribunales de Apelaciones de Circuito cuando:
Si su solicitud fue denegada debido a motivos de inadmisibilidad, podemos ayudarle a solicitar el perdón a través de:
Entender por qué se deniegan las solicitudes nos ayuda a construir apelaciones más sólidas. Los problemas más frecuentes que abordamos incluyen:
USCIS a menudo afirma que los solicitantes no lograron probar su elegibilidad o relación. Contrarrestamos esto:
Las inconsistencias en declaraciones o documentos pueden provocar denegaciones. Nuestro enfoque incluye:
A veces USCIS o los jueces de inmigración aplican mal la ley. Desafiamos estos errores:
Las violaciones técnicas pueden descarrilar solicitudes válidas. Identificamos y abordamos:
Cada apelación exitosa comienza con la comprensión de lo que salió mal. Nuestro proceso comienza con:
Las apelaciones tienen éxito o fracasan según la evidencia. Fortalecemos su caso:
La ley de inmigración es compleja y está en constante evolución. Nuestras apelaciones aprovechan:
Cuando las apelaciones implican audiencias en persona, la preparación es crítica. Nos aseguramos de que esté listo mediante:
Una denegación de inmigración no es solo papeleo—es la unidad de su familia, su carrera y su futuro en este país. Abordamos cada apelación con la urgencia y dedicación que su caso merece.
Apelar con éxito requiere entender cómo los funcionarios y jueces de inmigración evalúan los casos. Nuestra experiencia nos da una idea de qué argumentos resuenan y qué evidencia convence.
A veces, el mejor camino a seguir no es obvio. Identificamos estrategias alternativas cuando las apelaciones estándar podrían no tener éxito, incluyendo:
Las apelaciones de inmigración son lo suficientemente estresantes sin estar en la oscuridad. A lo largo de su caso, proporcionamos:
La mayoría de las apelaciones de inmigración tienen plazos estrictos—típicamente 30 días o menos desde la fecha de la decisión. Esperar incluso un día demasiado puede cerrar permanentemente su camino hacia el alivio.
Si ha recibido una denegación, contáctenos inmediatamente. Incluso si cree que ha perdido un plazo, llame de todos modos—ciertas excepciones y estrategias alternativas pueden estar aún disponibles.
No deje que una denegación de inmigración determine su futuro. Llame a Holden Law Firm hoy para programar una consulta en nuestra oficina de Gainesville. Permítanos ayudarle a escribir el siguiente capítulo de su historia de inmigración—uno con un final diferente.
La información proporcionada en esta página es de naturaleza general y no pretende ser un consejo legal. Las leyes de inmigración cambian con frecuencia, y cada caso es único. Por favor, contacte nuestra oficina para recibir orientación específica para sus circunstancias.
Los plazos varían significativamente según el tipo de apelación. Las apelaciones de la BIA suelen tardar de 6 a 18 meses, mientras que las apelaciones de la AAO oscilan entre 4 y 12 meses. Las mociones para reabrir o reconsiderar pueden decidirse en 1-3 meses. El litigio en tribunales federales puede llevar 1-2 años o más.
Depende. Algunas apelaciones suspenden automáticamente las órdenes de deportación, mientras que otras no. Podemos asesorarle sobre su situación específica y, cuando sea necesario, solicitar suspensiones de deportación para protegerlo durante el proceso de apelación.
Los costos de apelación varían según la complejidad, el foro y el trabajo requerido. Durante su consulta, le proporcionaremos una estructura de honorarios transparente basada en las necesidades específicas de su caso. Recuerde que las apelaciones son una inversión en su futuro en los Estados Unidos.
A menudo hay disponibles múltiples niveles de apelaciones. Si una apelación no tiene éxito, podemos explorar opciones adicionales, incluyendo apelaciones administrativas superiores, revisión por tribunales federales o vías alternativas de inmigración basadas en sus circunstancias.
Depende del tipo de apelación. Las apelaciones de la BIA generalmente se limitan a la evidencia en el registro existente, mientras que las mociones para reabrir específicamente permiten nueva evidencia. Le asesoraremos sobre qué evidencia puede presentarse en su apelación particular.
¡Hola! Soy la abogada Giovanna Andrea Holden. Me dedico a ayudar a nuestra comunidad hispana a adquirir o proteger su estatus legal.
Nací en Colombia e inmigré a los Estados Unidos a los 19 años junto con mis padres y mis hermanos. Afortunadamente, mi abuelo materno se convirtió en ciudadano estadounidense y pudo solicitarnos. Aunque el tiempo de espera fue largo, logré llegar a los Estados Unidos antes de que ya no pudiera calificar para la residencia debido a mi edad.
Como muchos hijos de inmigrantes, siempre he tenido presente el sacrificio que hicieron mis padres al venir a un país nuevo para brindarnos una vida mejor y con más oportunidades. Por eso, decidí esforzarme durante mis estudios para convertirme en abogada. Realicé mis estudios universitarios en la Universidad de Brenau en Gainesville, Georgia.
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